2005

Turó d’en Mota

La cosecha 2005 materializa la persistencia de la memoria. La añada 2005 materializa la persistencia de la memoria. Bajo la perspectiva del recuerdo, se dibuja una añada de lluvias tímidas, meses de invierno osados y cielos de verano incandescentes que esculpen el carácter mediterráneo de un gran vino de guarda.

VENDIMIA 2005

  • Punto óptimo de maduración y vendimia: 27 de agosto 2005
  • Vendimia manual
  • Producción anual del viñedo: 5.400 kg de uva.
  • 3.984 botellas, todas numeradas.

METEOROLOGIA

  • Temperatura media de la campaña 2004 – 2005: 15,6 ºC
  • Temperatura media histórica: 15,4 ºC
  • Lluvia de octubre del 2004 a septiembre del 2005: 365 mm.
  • Media histórica de lluvias en Sant Sadurní d’Anoia: 527 mm.

CRIANZA

  • Larga crianza de un mínimo de 120 meses con tapón de corcho natural.
  • Aclarado manual en pupitres
  • “Degollado” a mano sin congelar el cuello de la botella.
  • Vinificado, elaborado y criado en Recaredo

Presentación

Servir en copa alta con forma de tulipán, de base ancha y parte superior ligeramente cerrada.

Conservación

Conserve esta botella a 15ºC para garantizar una buena evolución.

Recomendaciones

Para apreciar toda la complejidad, recomendamos abrir la botella unos minutos antes y servirla en torno a los 10ºC.

  • La próxima cosecha de lo que considero la cima de los vinos espumosos del Penedès es Turó d’en Mota 2005; una variedad, un lugar, una cosecha y una añada de xarel·lo plantado en 1940. Un vino soberbio, profundo y mineral

    Luis Gutiérrez catador para The Wine Advocate – Robert Parker

  • Un vino altamente gastronómico que te hace salivar. Lo podríamos perfectamente situar entre los mejores espumosos del mundo. ¡Bravo!”

    Luis Gutiérrez catador para The Wine Advocate – Robert Parker

Ubicación y geología de la viña

  • La viña Turó d’en Mota cuenta con 0,97 ha con exposición norte y noreste. Sólo en las cosechas extraordinarias, como la de 2006, se incorpora una parte de la viña de 0,55 ha con exposición sureste.
  • Suelos de textura franca-limosa (equilibrio de arenas, limos y arcillas) y naturaleza muy calcárea. Se tratan de suelos profundos y bien drenados, con capacidad de almacenamiento de agua moderada.
  • Suelos muy evolucionados debido a la presencia de un horizonte cálcico con importantes acumulaciones de carbonatos en forma de nódulos, es decir, piedras formadas a partir de las concentraciones de cal. Cuentan con un calcáreo activo del 14%, lo que los hace suelos extremadamente calcáreos.
  • Materia orgánica del 1,5% (muy baja) y pH del suelo del 8,5 (muy básico).